Se define “criollo lisérgico y sinfónico blusero”. Dice que en broma, pero también para “resumir”. Cosa rara esto de las definiciones, si realmente interesaran nos daríamos cuenta que ninguna alcanza. Comodidades. También hay un carpincho –antes de que salgan por televisión- en la tapa del disco que aquí nos trajo. “Jaja, no sé si me identifico con ese animal, sí que es un bichito criollazo, muy identificado con valores y tradiciones. El juego es que este animalito tan nuestro reemplaza al perro de la vieja RCA Víctor, símbolo infaltable de los viejos discos de pasta y vinilos”, agrega.
Hernán Brignani (Vicente López, 1976) es maestro de música y piano, aunque sus primeras presentaciones fueron como cantor y guitarrero dentro del ámbito del folclore sureño. Recuerda que venía a la antigua Uribelarrea, previa al aluvión, solo a sentarse en los boliches a que los gauchos le sirvieran caña y a aprender de ellos. “Una vez escuché a José Larralde. Un disco con la carátula minimalista, diríamos ahora: fondo negro y una guitarra sola. Me voló la cabeza”.
Coincidió su época de residir en el conurbano y venir siempre a Cañuelas. Normalmente es el rock o alguna invención joven lo que “vuela la cabeza”, ¿cómo lo va a hacer Homero o el Martín Fierro? “Época –continúa- de salir caminando por 25 de Mayo y seguir bordeando el monte Mateo hasta el cementerio, o ir a pescar al fondo del barrio La Unión a La Montañeta, así me impregné de ese sonido y esa poesía sureña y orillera (tanto como yo mismo me sentía)”. Lo que da una imagen casi idealizada para los locales, él la siente “una conexión muy grande, muy natural y elemental, ‘no forzada’, con todos esos ritmos y esas letras que eran de mi propio lugar, de mi provincia y de mi país”.
Quizá ya no exista la ruralidad como cultura, quizá haya que asumir una mezcla originaria, un cruce de miradas que en el aire ya prefigura otro modo de estar. El conurbano –junto con este borde de campo- no parte de un diseño, de alguna idea prístina; es red autogenerada y desbordante. Mientras tanto, José Larralde sigue componiendo sus milongas desde un pequeño departamento de Constitución.
¿Qué podemos decir de las últimas producciones de Brignani? Desde influencias muy diversas y música “a la mano” compone frescos, instrumentales que son forma y contenido. La experimentación, la casualidad enseguida adquiere rítmicas y colores familiares, como un atardecer en la pampa.
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Imagen de portada: vertice de la tapa del disco “Instrumentales” de Hernán Brignani.